¿Por qué China cancela compras de carne del MERCOSUR?

El gobierno de China ha suspendido las importaciones de carne vacuna de siete frigoríficos de Argentina, Brasil, Uruguay y Mongolia, en lo que se interpreta como un nuevo intento de Pekín por regular su mercado interno y mitigar los efectos de una sobreoferta que ha afectado a sus productores locales. Entre las empresas argentinas afectadas se encuentran Frigorífico Regional General Las Heras SA y Frio Dock SA, así como a la uruguaya Frigorífico Sirsil S.A. y tres compañías brasileñas: Frisa Frigorífico Rio Doce S/A, Bon-Mart Frigorifico Ltda, y JBS S/A.
La medida anunciada por la Administración General de Aduanas de China no especificó razones concretas para la suspensión de estas empresas. Sin embargo, fuentes del sector apuntan a que el incumplimiento de envíos por parte de algunas plantas frigoríficas, así como el exceso de carne importada en el mercado chino, podrían estar detrás de la decisión.
El caso de Frigorífico Regional General Las Heras SA es un ejemplo concreto. En noviembre del año pasado, la empresa no cumplió con un embarque de 70 contenedores con destino a China, lo que generó incertidumbre y malestar entre los compradores. La firma, que emplea a más de 500 trabajadores, ha enfrentado dificultades debido al tipo de cambio desfavorable y problemas financieros internos. Su propietario, Mariano Martínez, admitió que han tenido retrasos en los envíos debido a una menor capacidad de producción y a la necesidad de cumplir con deudas previas.
«El negocio con China ya no es tan rentable como antes. El tipo de cambio no nos favorece y estamos trabajando con capacidad ociosa, lo que impacta en nuestra capacidad de respuesta a la demanda», afirmó Martínez en una entrevista con Canal Rural. La situación ha derivado en que el frigorífico fuera excluido de la Unión de la Industria Cárnica Argentina (UNICA), la principal cámara del sector.
Por su parte, Frio Dock SA, la otra firma argentina suspendida, no es un frigorífico en sí mismo, sino una empresa que brinda servicios de almacenamiento a baja y media temperatura. Esta suspensión implica que todos los contenedores que estaban previstos para salir desde este depósito tampoco podrán hacerlo, afectando a múltiples actores de la cadena de exportación.
El contexto del mercado de carne en China
China es el mayor importador mundial de carne vacuna, y en 2024 registró un récord de 2,87 millones de toneladas importadas. Sin embargo, esta fuerte entrada de producto extranjero ha generado un exceso de oferta que ha deprimido los precios internos, afectando a los productores locales. En respuesta, el Ministerio de Comercio de China inició una investigación sobre el impacto de las importaciones en su industria cárnica, cuyos resultados se esperan para finales de este año.
La Asociación China de Agricultura Animal (CAAA) ha preparado materiales relacionados y presentado una solicitud a las autoridades pertinentes, con la esperanza de utilizar las reglas de la OMC para ayudar a abordar las dificultades temporales de la industria de la carne vacuna en medio de desafíos significativos en las operaciones nacionales y el aumento de las importaciones de carne de res.
El precio promedio nacional de la carne vacuna fue de 60,04 yuanes (8,23 dólares) por kilogramo hacia fines de 2024, lo que representa una caída interanual del 14,79 % y el nivel más bajo desde septiembre de 2019.
Aún peor, según líderes de la industria, en algunas regiones los productores ya han vendido y sacrificado vacas reproductoras a gran escala, lo que ha socavado gravemente los cimientos de la industria cárnica de China.
Al mismo tiempo, los empresarios del sector destacaron que las importaciones de carne vacuna extranjera han crecido rápidamente en China, particularmente entre 2019 y 2023, período en el que las importaciones de carne de res aumentaron un 65 %. En la primera mitad de 2024, las importaciones de carne vacuna más que duplicaron las registradas en el primer semestre de 2019.
Mientras tanto, casi el 70 % de los productores de ganado en China están registrando pérdidas en la actualidad, según informaron los líderes de la industria en la reunión.
Golpe al Mercosur
La posibilidad de que China aplique restricciones adicionales, como aranceles más altos o cupos de importación, es una preocupación creciente para los principales exportadores de carne, incluidos Argentina, Brasil y Uruguay. «Si se confirma que las importaciones están afectando a los productores chinos, podría abrirse la puerta a medidas de salvaguarda que podrían durar hasta cuatro años», advirtió Miguel Jairala, asesor económico del Consorcio ABC, que agrupa a las principales empresas exportadoras argentinas.
Argentina ha incrementado sus exportaciones de carne vacuna en los últimos años, con un crecimiento del 13,5% en 2024, alcanzando las 760.000 toneladas peso producto. Sin embargo, el valor total de estas ventas fue de US$2.975 millones, lejos de los US$3.450 millones de 2022, lo que refleja la caída de precios en el mercado internacional.
La incertidumbre sobre las restricciones chinas genera preocupación en el sector. China representa más del 50% de las exportaciones argentinas de carne, por lo que cualquier interrupción en el flujo comercial impacta directamente en la economía de los frigoríficos y en la generación de empleo. «Si China sigue reduciendo sus compras o impone aranceles adicionales, los frigoríficos argentinos deberán buscar mercados alternativos, lo que no es tarea fácil», explicó un analista del sector.
La noticia de la suspensión generó reacciones en distintos actores de la industria. Gustavo Valsangiacomo, presidente de la Unión de la Industria Cárnica Argentina, destacó la importancia de garantizar el cumplimiento de los contratos internacionales para evitar situaciones similares en el futuro. «Es fundamental mantener la confianza de los importadores y evitar problemas que perjudiquen a todo el sector», señaló.
Desde Brasil, la Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA) indicó que está en contacto con las autoridades chinas para entender las razones detrás de la suspensión y evaluar posibles soluciones. «El mercado chino es clave para nosotros y estamos trabajando para garantizar la continuidad de los envíos», afirmaron voceros de la ABPA.
Por otro lado, en Uruguay, la suspensión del frigorífico Sirsil SA también generó preocupación, aunque el país ha logrado diversificar sus exportaciones hacia otros mercados como la Unión Europea y Estados Unidos.
Mientras el sector espera los resultados de la investigación del gobierno chino, la incertidumbre sigue pesando sobre el comercio cárnico internacional. Si China decide aplicar medidas restrictivas, podría derivar en un reacomodamiento del mercado global, con posibles consecuencias en los precios y en la estructura de las exportaciones de los países afectados.
Para Argentina, la clave será mantener la confianza del mercado chino y, al mismo tiempo, diversificar sus destinos de exportación para reducir su dependencia del gigante asiático. «Si bien China es nuestro principal comprador, debemos fortalecer otros mercados y consolidar nuestra presencia en regiones como la Unión Europea y Oriente Medio», concluyó un experto del sector ganadero.
En un escenario global incierto, los exportadores de carne argentina enfrentarán un 2025 desafiante, con la necesidad de adaptarse a las fluctuaciones del mercado internacional y a las decisiones políticas y comerciales de sus principales socios.
FUENTE: Reporte Asia