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Exportadores de carne de Argentina buscan nuevas oportunidades en el contexto de la guerra arancelaria

La guerra de aranceles entre EE. UU. y China obliga a los exportadores argentinos a buscar otros mercados. Pese a que los primeros meses de este año no han sido favorables, figuras del sector agropecuario son optimistas y consideran que hay posibilidades de encontrar otros mercados para comercializar sus productos.

Si bien el primer trimestre del año 2025 no fue para nada alentador para el sector exportador de carne argentina, las expectativas a futuro son optimistas. En lo que va de año, las ventas al exterior de carne bovina resultaron cercanas a las 142.500 toneladas por un valor de aproximadamente 694,4 millones de dólares, lo que marca un fuerte descenso en volumen del 28 % y en su valor del 7,5 %. Esto según un informe que elabora el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC). Las causas de esta tendencia responden a varios motivos, entre ellos la guerra de aranceles entre EE. UU. y China.

“Me parece que es un momento de tensión muy fuerte, respecto de la inestabilidad política, económica y sobre todo arancelaria, vamos a ver cómo termina toda la incertidumbre arancelaria que hay instalada en el mundo, esto es uno de los motivos por los cuales estamos pensando, viendo, me parece que al mundo le tocan 3 o 4 o 5 meses de incertidumbre político-económica”, dijo Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina. 

Aunque esto también es visto como una oportunidad a futuro.

“Si el comercio de carnes Estados Unidos-China decae, es muy posible que Argentina empiece a producir animales más pesados y con mayor tenor graso y eso es seguramente a lo que vamos a aspirar aquellos que no entramos en China por las ventas de Estados Unidos. Pero vamos a poder ingresar en ese momento”, agregó Miguel.

Lejos de las posibles repercusiones por la guerra de aranceles, la situación para los productores ganaderos gira en torno a otros problemas que más tienen que ver con la economía del país y la caída del consumo interno.

“El presente se vive con una incertidumbre superior pero siempre pensando para adelante y viendo a ver de qué manera podemos seguir produciendo y poder seguir dando al consumidor la mejor carne que tenemos para ofrecer”, dijo Cristian Giacobone, productor de carne y presidente de la Sociedad Rural de San Andrés de Giles de Argentina.

En lo que va de año, China registró una baja del 52 % de las compras de carne congelada sin hueso de Argentina, al pasar de volúmenes cercanos a las 36.000 toneladas mensuales entre agosto y noviembre de 2024 a 17.161 toneladas en marzo. Esta baja se dio por dos motivos, la caída de los precios internacionales y la expectativa de una corrección en el tipo de cambio en Argentina, lo que llevó a los exportadores a postergar operaciones en busca de un tipo de cambio más favorable.

“El productor ganadero hoy tiene una problemática que es extratranquera, pero no extrapaís. Las complicaciones de índole de inflación, de índole de dólar, como decías vos, también de infraestructura, venimos muy muy relegados en lo que es el interior de la provincia de Buenos Aires y en el interior del país en lo que es, caminos, energía eléctrica, acceso al crédito”, indicó Cristian Giacobone.

Según el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC), China sigue siendo el principal destino para la carne bovina que se produce en el país. En lo que va de año, el 65 % de las exportaciones tuvieron como destino final al país asiático. En este contexto de guerra arancelaria entre EE. UU. y China, se especula que esta cifra pueda ser aún mayor e incluso que también suba el precio que se paga por tonelada. 

FUENTE: CGTN