Faena Kosher: Un vuelo que reactivaría el interés por novillos…
La incertidumbre mundial continúa, los exportadores esperan por la llegada de los rabinos como alternativa para potenciar los envíos de carne. Entre tanto, el INAC define apoyos y confirma una problemática que hace mucho tiempo es un dolor de cabeza para el sector industrial.
Hay que volver a hablar de Israel. Mientras el mundo se concentra en caminar rumbo a la normalidad, con cuidados sanitarios que por mucho tiempo vamos a recordar, los exportadores de carne del Mercosur esperan la llegada de los rabinos para comenzar con la faena kosher.
El martes, previo a que el Ministro de Ganadería confirmara la llegada de las cuadrillas de faena para principios de junio, en la Junta del Instituto Nacional de Carnes (INAC) nueve plantas frigoríficas anunciaron el interés de trabajar con destino al mercado israelí. Y no es todo, además el INAC aseguró un aporte de US$ 20.000 para financiar los test de Coronavirus que se realizarán a los especialistas en tres instancias.
La salida del charter que transporta a los israelíes está prevista para el sábado 30 de mayo, aterrizando en Buenos Aires. Posteriormente los equipos de rabinos llegarán a Uruguay, y al ingresar se les realizará el primero de los test.
El segundo será en los alojamientos donde tendrán que cumplir una cuarentena especial. Y el último se efectuará previo a entrar a las plantas. Una requisito definido con las autoridades nacionales para evitar cualquier tipo de riesgo de contagio de Coronavirus.
Pero hay un detalle: de las nueve plantas interesadas, solo cinco están con negociaciones avanzadas.
¿Por qué?
Es que no todos los frigoríficos cuentan con el cajón especial para realizar la faena, exigencia del mercado de Medio Oriente que rige desde 2018.
En cuanto a precios, las plantas locales estiman cerrar los negocios en US$ 6.500 por tonelada, mientras en Argentina se concretaron a US$ 7.500 y en Paraguay se maneja una referencia cercana a los US$ 5.000 por tonelada.
El vuelo reactivará la demanda de novillos, una categoría que perdió el interés de los frigoríficos tras la baja del mercado europeo y marcó un cambio en el negocio de haciendas: las vacas ajustaron su diferencia a US$ 0,10 con una cotización de US$ 3,10 el kilo al gancho y las vaquillonas empardaron su valor con un US$ 3,20.
Por las hembras sí hay interés, en las vacas por la demanda de carcasas de China y en las vaquillonas por las compras de las plantas para el mercado interno. Volviendo a los novillos, varios operadores coincidieron que la llegada de los rabinos empujará a los compradores y aumentará la demanda.
¿Y Europa?
Hablando de Europa, un detalle más; mañana lunes en la Junta del INAC se definirá la estratégica del negocio cárnico con Gran Bretaña, tras su retiro de la Unión Europea.
Una más del Instituto. También mañana lunes se definirá una comisión técnica con integrantes de Junta para evaluar la mejor propuesta y contratar una empresa que será la encargada de desarrollar la auditoría interna votada de forma unánime.
FUENTE: El País