Para Uruguay China cierra el semestre como el principal mercado de carnes
China representa el mayor comprador de Uruguay en volúmen y divisas. La demanda de Estados Unidos sigue operando en forma tranquila.
Por otra parte por más que se espera que aumente la demanda de Estados Unidos, es un mercado que sigue operando en forma calma y no incide demasiado para captar el flujo de negocios que hoy va hacia el mercado chino, destacó a El Observador el vicepresidente del Frigorífico San Jacinto, Gastón Scayola.
Por su parte Europa registra también una operativa muy tranquila y por lo tanto el nivel de demanda de carnes está muy “quieta”. Dijo que “apenas se están cerrando los contenedores con cortes Hilton con cierta frecuencia para ese destino”. Igualmente no es algo que esté presionando en la demanda por lo que se viene operando con precios estabilizados en carne bovina y bajos en carne ovina. Por su parte las ventas de carne a Rusia no se normalizaron luego de la devaluación de su moneda y además está “copado” por la oferta de carnes de Paraguay. En consecuencia los grandes mercados de Uruguay hoy son China e Israel. Éste último estaba muy lento mientras no se destrabó el tema de las faenas Kosher que ya están comenzando.
Por lo tanto, Rusia por problemas de precios, Europa por crisis y Estados Unidos porque todavía no se ha puesto viable con los precios que maneja, obligan a que los dos mercados clave para Uruguay sean China e Israel, sostuvo Scayola. La dificultad principal de operar con Israel es que representa una presión comercial muy fuerte sobre la demanda de novillos pesados y bien terminados y lamentablemente la perspectiva que se observa hasta setiembre es que no habrá abundancia de animales de esta categoría bien terminados.
Por esa razón este año Frigorífico San Jacinto no estará trabajando con ese mercado, pero es claro que los negocios que concreten los restantes frigoríficos será un factor de presión sobre la disponibilidad de novillos terminados que en una situación de oferta limitada su precio se habrá tenderá a elevarse considerablemente. A su vez los precios de Israel no son tan buenos como para que permitan mejorar excesivamente los precios que se manejen por las haciendas, por lo que quienes hagan negocios para ese mercado van a estar en un equilibrio complicado. Esta situación trae como consecuencia que los frigoríficos que no participan de ese mercado están muy dependientes de los negocios con China que se espera que sigan con una fluidez normal.
FUENTE: El Observador