A la inversa que para la situación de las vacas, los envíos a faena para las categorías novillos y novillitos, resultaron un 6% y 8% superior al mismo mes del 2014 respectivamente. En este caso también parecería una tendencia consolidada el aumento de estas categorías en la faena respecto de 2014. Esta información resulta relevante, ya que a pesar de que todavía es muy magro este incremento, pareciera que asistimos a un cambio en la tendencia respecto a la faena de novillos, después de 8 años de una caída ininterrumpida.
El panorama descripto para el mes de Julio de 2015 arroja una participación de hembras en la faena que se ubica nuevamente cercano al 41%, nivel que no alcanza para asegurar que se está en presencia de un nuevo período de retención de hembras, pero que resulta visiblemente inferior a los registrados durante 2014, año en el que se registraron valores cercanos al 45%. Gran parte de este indicador está explicado por la reducción de la categoría vacas ya mencionada, así como el aumento de novillos y novillitos. Esta reducción de los envíos de vacas a faena, no necesariamente está marcando una ampliación del stock de vientres en el rodeo, ya muchas de ellas han ingresado en un sistema de invernada que resulta más atractivo que en años anteriores, principalmente por tres razones: la relación carne/maíz muy favorable, el buen estado general de los campos, y una enorme cantidad de hectáreas de aptitud mixta, que este año no serán destinadas a la agricultura y quedarán disponibles para el pastoreo de estas categorías.
Analizando el período de Enero a Julio de 2015 vemos entonces un incremento en los envíos totales del orden del 1,5% en cabezas respecto de igual período del año pasado. La tendencia más consolidada es la de las vacas, ya que en dicho semestre verifica una reducción en valores cercanos al 10%. A la inversa, los novillos y novillitos consolidan la tendencia positiva en el orden del 5% y 8% respectivamente. La proporción de hembras en faena para el período se ubica algo por encima del 43%, pero con una tendencia a la baja, mostrando todavía una estabilidad en la dinámica del rodeo. Habrá que seguir evaluando este indicador y su tendencia para determinar que decisiones están tomando los productores de cara a un nuevo año en el que, seguramente, el contexto ganadero será diferente.
FUENTE: Decisión Ganadera