“El precio de hoy de la hacienda es una fantasía”
El consultor Víctor Tonelli, una de las voces más respetadas en el mundo ganadero, analizó la situación actual de los precios y dejó su proyección para el corto y para el mediano plazo. “Los valores de hoy en el Mercado de Cañuelas son absolutamente coyunturales, no reflejan la realidad”, explicó. “Para las Fiestas veo un asado de 6.000 pesos el kilo, no los disparates de 8.000 o 10.000 que hablan algunos”, pronosticó
“Lo que pasa esta semana para mí no refleja lo que es la relación natural de oferta y demanda. Hemos tenido entre un 40 y un 45% de aumento si uno mide los valores de ayer respecto al miércoles de la semana pasada en el Mercado de Cañuelas, y a mi gusto son valores que no reflejan en absoluto la realidad ni lo que va a venir la semana que viene y la otra”, le aseguró a La Voz del Pueblo el consultor Víctor Tonelli en el inicio de una charla motivada por la disparada del precio de la hacienda en pie y sus repercusiones en las carnicerías.
– ¿Qué análisis haces de la importante suba del precio de la hacienda?
– Yo separo lo coyuntural de lo estructural. Y lo que estamos viendo esta semana es absolutamente coyuntural. Tiene que ver con los anuncios que se esperaban que se hicieran, y que finalmente se hicieron pero que fueron incompletos, y que todavía siguen generando dudas respecto a lo que viene. Eso hace que el productor de ganado, como el productor de tornillos o de lo que sea, no venda en función del temor que después no pueda reponer al valor que vendió o con algún margen razonable para para cubrir costos y ganancias. Si hasta el martes a la noche no sabíamos cuál era el tipo de cambio si quiera.
– ¿Entonces estos precios no llegaron para quedarse entonces?
– No no, lo de esta semana, para mí, es totalmente coyuntural. Y entiendo la preocupación de doña Rosa y de los carniceros, pero no refleja la realidad de la semana que viene, de la otra, de la otra, y de la otra.
“Claro que me puedo equivocar, pero esta es mi percepción, mirando los números, las existencias, los stocks y cómo viene la cosa”
– ¿Cómo estamos hoy respecto a la oferta? ¿Hay hacienda?
– El último dato de existencia de hacienda en feedlots, que proveen por lo menos el 50% del ganado gordo terminado, dio 1.750.000 cabezas y eso es un número que supera largamente el 10% en stocks de los últimos tres años para esta época del año. No es que falte hacienda. Lo que pasa es que el productor, frente a esta incertidumbre, esta semana no cargó y no hay ventas directas. Entonces, el Mercado de Cañuelas reflejó un número que es una fantasía. Para mí no refleja en nada la realidad.
“El vitel toné… El que no compró antes el peceto, ahora lo va a tener que ir a buscar a Uruguay…. Pero se puede hacer vitel toné con cuadrada, ojo, que la gente no lo sabe. Es un músculo muy parecido al peceto”
– ¿Y en cuánto estimás que podría quedar el valor de la carne?
– Es muy difícil dar un pronóstico porque todo sigue muy en el aire, muy poco claro, pero te diría que la semana que viene o la otra, los valores se tienen que retrotraer a los de la semana pasada o un poco más arriba. El novillito, el ganado para consumo, la semana pasada estuvo en 1.300 / 1.400 pesos el kilo. Si quedara en 1.500 pesos, para hacer un cálculo sencillo, lo multiplicás por 3,5 y eso te va a dar 5.500 pesos, que sería el valor del kilo de asado en el mostrador. No los 10.000 o 12.000 pesos que hablan, no tiene nada que ver. Claro que me puedo equivocar, pero esta es mi percepción, mirando los números, las existencias, los stocks y cómo viene la cosa.
Por lo tanto, no es que no le dé trascendencia, se la doy, pero esto no implica que vayamos a tener un asado de 7.000 o de 8.000 pesos. Estamos lejos de eso.
– Es difícil además que el consumidor esté dispuesto o pueda pagar esa suma.
– El mercado no lo convalidaría. El poder adquisitivo está totalmente deteriorado. Entonces yo te digo, si ya 5.000 pesos el kilo es un número que asusta a cualquier bolsillo, imagínate 7.000, 8.000 o 10.000 como se habla por ahí. La gente no va a comprar y no quedará otra que bajarlo.
Además, la carne es un producto perecedero. La media res que bajaron hoy en la carnicería, si no la vendés en tres días, el carnicero la tiene que hacer picada porque se le pone negra. Entonces, la tiene que vender, no puede especular guardándola a ver si mañana vale más.
– El valor de la hacienda estuvo planchada hasta julio, a partir de ahí fue recuperando lo que había perdido frente a la inflación. ¿En qué niveles estaba antes de la suba de esta semana?
– Hasta finales de julio de este año estuvo muy atrasada. A partir de ahí, pegó una levantada que superó a la inflación. La semana pasada habíamos duplicado el valor de julio y si vos haces un interanual, superó a la inflación en los últimos tres meses. Entonces, ya el número de la semana pasada era muy alto, era muy bueno para el ganadero. Si vos tomas lo de esta semana, es un disparate.
– Y en todo este contexto, ¿cómo influye en las fiestas? ¿Qué va a pasar con el peceto para el vitel toné?
– El vitel toné… El que no compró antes el peceto, ahora lo va a tener que ir a buscar a Uruguay…. Pero se puede hacer vitel toné con cuadrada, ojo, que la gente no lo sabe. Es un músculo muy parecido al peceto. Yendo al asado, para las Fiestas esperaría un precio de 6.000 pesos el kilo. De nuevo, me puedo equivocar, pero yo no veo los disparates que se hablan hoy, porque no guardaría ninguna relación entre la disponibilidad y la hacienda de los precios.
– ¿Cómo ves para el negocio ganadero el 2024?
– El 2024 es otro mundo porque si efectivamente el Gobierno avanza, como dijo, en quitar todo tipo de restricciones a las exportaciones, en dar un dólar más competitivo -que de hecho ya con este dólar obviamente es mucho más competitivo que el que teníamos para la exportación-, y además ingresaremos a un periodo en el que la disponibilidad de todas las categorías de hacienda gorda va a caer mes tras mes.
Sabemos que la escasez de oferta hará caer entre 7 y 8 kilos el consumo por habitante y por año que teníamos en este 2023, que va a cerrar cerca de 51. O sea, vamos a estar en 43, 44 kilos de vacuno, con una exportación recargada -si cabe la expresión-, por un mejor tipo de cambio y libre de todo tipo de restricción, el consumo el año que viene va a tener carne cara. ¿Cuánto? Es difícil decirlo, porque dependerá del poder de compra del consumidor.
– Para el productor ganadero son buenas las expectativas entonces.
– Va a ser un año de escasez de carne y precios caros en términos relativos, eso seguro, pero no en la magnitud que refleja esta semana. Para el ganadero se viene un año muy bueno, porque va a tener exportaciones libres, un tipo de cambio competitivo, y bajo nivel de oferta, con lo cual seguro va a mejorar sus precios relativos y su margen, sobre todo el criador y el recriador pastoril.
FUENTE: La Voz del Pueblo