¿La ganadería toma revancha?
Para el director ejecutivo de Rosgan, Raúl Milano, resulta obligado el balance de un año que ha sido realmente agitado para la ganadería, no pudiendo obviarse el análisis de las altas subas de precio evidenciadas recientemente: “Diciembre ha comenzado con el vigoroso arrastre del mes de noviembre, donde todas las categorías experimentaron fuertes subas.
Tanto la invernada como posteriormente el gordo han hecho un recorrido alcista, evidenciando en los números dos cuestiones: la ausencia de una oferta abultada y el proceso lógico de retención ante los incrementos; y la consolidación de las perspectivas del cambio de gobierno, que augura una relación madura con el sector, dejando atrás los innecesarios castigos que tanto daño causaron a los productores y al país”, reflexiona el directivo.
En el mismo sentido, se refiere Milano a la política económica del período que ya toca su fin: “Decidir no ser un país exportador para sobreabundar de oferta barata al mercado interno nos dejó sin mercados externos y, a la vez, con precios sostenidos en un sector que dilapidó 10 millones de cabezas achicando la oferta”.
El director ejecutivo de Rosgan finalmente se interroga también sobre el futuro próximo, en el que sospecha deberá haber una necesaria transformación de la tendencia alcista: “Seguramente la inmensa mayoría de productores que hoy escapan del peso, comprando animales caros para reponerse rápidamente, se estén haciendo la misma pregunta que nosotros: ¿Cuánto tiempo seguirá la ganadería manteniendo estos altos valores, impensables hace un mes atrás?
En esta finalización de año, fiestas de por medio y cambio de gobierno, los gastos son más flexibles. Sin embargo, quien marcará el límite definitivo de las subas será el mercado interno, que es el 94 % de la faena total. Y sus alertas se notarán en un tiempo bastante cercano”, concluye.
FUENTE: Rosgan