Más producción, consumo y exportación de carne
La producción de carne vacuna creció un 7% en el primer trimestre del año. La oferta se mantendría alta durante todo 2018, pero no pasa lo mismo con la demanda interna, que viene muy castigada por la inflación. Lo bueno es que habría mayor salida a los mercados internacionales.
En los primeros tres meses del año la producción de carne vacuna tuvo un crecimiento del 7% con respecto al primer trimestre del año pasado, por lo que hay más hacienda y más carne en el mercado.
El aumento respondió a la mayor oferta que causó la sequía, que lentamente comenzó a cortarse en algunas regiones de la zona pampeana aunque otras siguen seriamente afectadas y con serias dificultades para recomponer su base forrajera. Para peor, entramos en el período de menor producción.
Los campos, por otra parte, venían cargados de hacienda por la retención de 2015 y parte de 2016 y además por la apuesta a la recría y la transformación de muchos agricultores y productores mixtos.
En la medida en que se comiencen a estabilizar las lluvias es probable que en los meses que vienen se observe una desaceleración de la oferta, al menos en las categorías de vacas. Por otro lado, para el invierno y en los meses siguientes se puede esperar un aumento de la oferta de hacienda liviana debido a que la apuesta con un maíz caro será por engordes más cortos, de 90 días, y a sacar animales livianos.
El costo del maíz y de todos los insumos que forman parte de la alimentación vacuna obliga a esa estrategia y a dejar de lado la tendencia a la recría y al agregado de kilos. La relación maíz carne es 10/11 a 1, mucho más en línea con los registros históricos pero mucho menos conveniente para el engorde intensivo de la que hubo en otras oportunidades, cuando la mezcla de políticas restrictivas al comercio y crecimiento de la cosecha permitieron una relación que llegó en algún momento a ser de 40 a 1.
La contracara de la mayor producción de carne vacuna que se observa en el arranque del año es la caída en términos reales de los precios de la hacienda. Medidos en términos nominales, los valores del novillo en marzo (los que informa el Ministerio de Agroindustria) fueron 10% superiores a los que había en marzo del año pasado. Pero si se computa el efecto inflacionario, que se estima en 25%, las cotizaciones tuvieron un retroceso del 8/9%.
Se trata además del segundo año de retroceso en los valores reales del ganado vacuno y se espera además que la tendencia continúe en lo que queda de 2018, porque si bien crece la participación de la exportación en el negocio habrá de todos modos una oferta alta que compite con las demás carnes por un mercado interno cuyo poder de compra se reduce al calor de una inflación que supera por mucho a la recomposición salarial.
Las condiciones macroeconómicas y las sectoriales complican el resultado económico ganadero. Hay que tener en cuenta que a la caída de los valores reales de la hacienda se agregan los mayores costos sectoriales, entre los que se destaca el fuerte aumento del maíz y otros componentes, como por ejemplo el incremento en combustibles. Son factores que achican la renta de la producción.
El menor poder de pago de la demanda interna de carne vacuna se refleja en los precios de la hacienda, pero también en los valores de la góndola. Según el último informe del Ipcva: “Los precios de los distintos cortes de carne vacuna mostraron, en promedio, alzas moderadas del 4,3% en marzo de 2018 con respecto al mes de febrero. Con respecto a los valores de marzo de 2017, los precios promedio de la carne vacuna del segundo mes del corriente año se ubican 17,7% por encima”. También aumentaron, pero menos que la inflación, los valores de las otras carnes (pollos y cerdos) que se disputan un espacio en el plato de los argentinos. “El precio del pollo fresco mostró una suba moderada del 3,7% en el mes de marzo de 2018 con respecto a febrero”. Por su parte el precio del pechito de cerdo aumentó 14% interanual de marzo a marzo.
La oferta de carnes sigue siendo alta. El mercado interno dispone de casi 60 kilos de la vacuna, cerca de 40 de la aviar y unos 15 de carne de cerdos, a los que se suma el aporte marginal de la especie ovina. En los últimos años el total va de los 115 a 120 kilos, es uno de los más altos del mundo.
Según las estadísticas de la FAO, la oferta de carnes a nivel interno es equiparable con el que tienen los principales países de la Unión Europa y Australia y superior todavía al de Estados Unidos, aunque por supuesto que la participación de cada especie en el plato varía y también la composición social, lo que significa una apropiación diferencial del bien.
La oferta de carne vacuna creció en el primer trimestre del año 7%, eso significa unas 50.000 toneladas más, de las cuales 30.000 fueron a la exportación. El 60% del total agregado a la oferta fue canalizado por las empresas exportadoras a los mercados internacionales, lo que evitó una mayor saturación de la plaza local.
Si el escenario actual de mayor oferta por la seca se combinara con la política que impuso el kirchnerismo de retenciones, ROES, retraso cambiario y controles de precios, estaríamos hablando de una crisis sectorial. En efecto, ese fue el esquema que rigió durante la sequía de 2008/2009, por eso el productor se queja pero en voz baja de la situación actual y del deteriorado resultado económico de la ganadería.
Fuerte aumento en exportaciones
En el acumulado de enero-marzo las exportaciones de carne vacuna aumentaron 44,5%. No hay otro sector de la economía que pueda demostrar esos números en su balanza comercial. Gran parte del crecimiento exportador se debe a la creciente demanda de China de carne de vaca, pero también a la mejora de la competitividad sectorial.
Las empresas del sector que operan en los mercados internacionales gozan del beneficio impositivo de los reintegros fiscales y la caída del precio del novillo en dólares. De acuerdo a la estadísticas de Ipcva, el valor a marzo de la exportación medido en kilo gancho era de U$S1,73, muy similar al de Uruguay y Paraguay, aunque todavía superior en 20 centavos al de Brasil. Se trata por lejos del precio en dólares más bajo desde el inicio de la gestión de Mauricio Macri y explica en parte el aumento de los volúmenes embarcados en los últimos meses.
Perspectivas para el mercado mundial de carne vacuna
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) estimó en su informe de otoño que la producción mundial de carne vacuna crecerá 2% en 2018 y llegará a las 63 millones de toneladas por el impulso de países como Estados Unidos, Brasil y la Argentina.
En tanto que las exportaciones crecerían en torno al 5% para alcanzar las 10,5 millones de toneladas por el mayor aporte de países como Brasil, Australia, Argentina y los Estados Unidos; y al mismo tiempo por el crecimiento de la demanda de China y Hong Kong, donde a su vez la producción interna se encuentra estancada.
Del lado de la oferta se destaca lo siguiente:
- El aumento de la producción de Brasil, que se deberá al incremento en el peso de faena, a una mayor demanda local y a exportaciones, que se espera que marquen un nuevo record. Se calcula que este año sus ventas al extranjero superarán las 2 millones de toneladas, lo que devolvería a nuestros vecinos al primer lugar del ranking.
- En el caso de los Estados Unidos se estima un aumento productivo del 6%, lo que significa alcanzar las 12,6 millones de toneladas. En tanto que las exportaciones aumentarían en igual porcentaje y llegarían a 1,4 millón de toneladas, lo que también constituiría un nuevo registro para ese país.
- En el caso de la Argentina, el USDA destaca que el aumento de la producción será marginal y obligado por las condiciones climáticas adversas para la producción.
De lado de la demanda hay que señalar que se calcula que China importará 1,2 millón de toneladas. Si se agrega lo que lleva Hong Kong, cuyas compras terminan en el gigante asiático, el total asciende a 1,8 millón de toneladas. Ese volumen es 25% superior a las compras del segundo importador mundial, que es Estados Unidos, y a su vez representa el 17% de las exportaciones totales que se estiman para este año.
FUENTE: El Diario de la República