Jueves, 06 Febrero 2020

Las exportaciones cárnicas bovinas siguen creciendo por inercia pero el negocio se licúa: “El futuro inmediato no parece ser prometedor”

Las exportaciones cárnicas bovinas siguen creciendo por inercia pero el negocio se licúa: “El futuro inmediato no parece ser prometedor”

En el primer mes de 2020 la actividad cárnica bovina siguió siendo impulsada por la dinámica de los factores presentes durante el año 2019, aunque existen señales que indican que los mismos podrían pronto desaparecer.

 

La producción de carne vacuna el mes pasado fue del orden de 260.000 toneladas res con hueso, una cifra 2% mayor a la registrada en el mismo mes de 2019, según estimaciones contenidas en el último informe mensual de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra).

En enero de 2020 se faenaron 544.500 hembras, un 1,1% más que en enero de 2019, mientras que la faena de machos creció 5,4% interanual para sumar 624.5000 cabezas.

“La participación de las hembras en la faena total se mantuvo en enero pasado en un nivel elevado del 46,6% –guarismo superior al techo del rango consistente con el sostenimiento del rodeo vacuno– pero quedó un punto porcentual por debajo del registro alcanzado en enero de 2019”, indicó el informe de Ciccra.

Al mercado interno se habrían enviado 187.800 toneladas de carne vacuna res con hueso en el primer mes del año, lo que implica una caída de 8,1% respecto a enero de 2019.

“Al suponer que la performance exportadora de los últimos meses continuó durante el arranque del año, con un volumen de 72.300 toneladas res con hueso, se habría registrado en enero pasado un crecimiento de 42,8% interanual y las exportaciones habrían llegado a representar 27,8% de la producción total, el valor más elevado de los últimos 25 eneros”, expresó el informe.

Sin embargo, tal como ocurre con muchos embarques de carne bovina del Mercosur destinados a China, aún está por verse cuándo y qué proporción de lo negociado terminará cobrándose luego del default comercial instrumentado en diciembre pasado por los importadores de la nación asiática (que sólo en el caso de Uruguay se estima que provocará una pérdida de al menos 60 millones de dólares).

“A pesar de que las exportaciones del año 2019 han sido las más importantes de los últimos treinta años, el futuro inmediato no parece ser prometedor debido a dos causas principales, una de origen local y otra de origen externo”, apunta el informe de Ciccra.

“La primera causa está en la falta de novillos pesados y muy probablemente en la falta de 300.000 terneros (estimado), debido al fuerte aumento de la faena de hembras registrado durante el año pasado (se faenaron 621 mil hembras más que en 2018)”, explica.

La segunda causa procede de China, nación que, luego del default comercial, se vio afectada por la aparición de una nueva cepa del coronavirus, que “agiganta los problemas que ya existían con las exportaciones a China, producto de la cuarentena impuesta por las autoridades sanitarias de ese país, que genera fuertes complicaciones en la logística portuaria ante la falta de personal en los puertos que descargue los contenedores”.

“No contamos con información confiable respecto de la magnitud del problema de salud pública y no hay datos que nos permitan saber si las ventas de carne durante el año nuevo chino aumentaron, como era de esperar en esa época del año. Si la cuarentena se ha cumplido –evitando el traslado de personas y demás medidas restrictivas –es lógico suponer que no ha habido la demanda esperada y, por lo tanto, los pedidos desde ese país disminuirán fuertemente, hasta tanto puedan colocar los stocks existentes”, concluyó el informe.

FUENTE: Valor Soja

Compartir en redes sociales