Editorial CICCRA
Editorial Informe Económico Mensual N° 212 (septiembre 2018)
De acuerdo con nuestras estimaciones (provisorias), en septiembre se habría faenado un total de 1,025 millones de cabezas de hacienda vacuna. El empeoramiento de las condiciones macroeconómicas sería uno de los factores que explicarían por qué en septiembre se registró el segundo nivel de actividad más bajo del año (detrás del piso ‘lógico’ de febrero).
En la comparación con agosto se registró una caída de 12,5%, lo que implica que se faenaron 146,4 mil cabezas menos. Entre agosto y septiembre de 2018 se observó una mayor caída de la faena de hacienda vacuna con destino al consumo (-15,1%) en relación a la que tiene a la exportación como destino principal (-7,4%).
En tanto, al contrastar con septiembre de 2017, los números provisorios arrojaron la primera caída interanual (-2,0%) tras dieciocho meses ininterrumpidos de crecimiento.
A pesar del frenazo señalado, en septiembre se mantuvo el mayor dinamismo de la faena de hembras con relación a la de machos, lo que elevó su participación en la faena total hasta 45,4%.
En el cuatrimestre junio-septiembre de 2018 mientras la faena total avanzó a una velocidad de 5,0% anual, las faenas de vacas y vaquillonas crecieron 21,0% y 20,1% anual, respectivamente.
Tal como lo señalamos en Informes anteriores, la evolución de la faena de las diferentes categorías de hembras resultó consistente con el gran crecimiento de las exportaciones de carne vacuna a China/Rusia a lo largo del año en curso (duplicación en el primer caso, sextuplicación en el segundo caso, tomando los datos de enero-agosto de 2018; ver sección Nº 3).
La participación de las hembras en la faena total subió a 44,9% en los primeros nueve meses del año, ubicándose 2,5 puntos porcentuales por encima del promedio de enero-septiembre de 2017. Según nuestro análisis, el ciclo ganadero se mantuvo en una situación ´neutral´.
En lo que respecta a la producción de carne vacuna, en el noveno mes del año equivalió a 237 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h). En relación a agosto se observó una baja de 12,5%.
Al considerar los primeros nueve meses de 2018, la producción de carne vacuna llegó a 2,272 millones de tn r/c/h y se mantuvo 8,9% por encima del volumen producido en enero-septiembre de 2017 (+186,2 mil tn r/c/h).
En el noveno mes del año se habrían producido sólo 237 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h). Es decir, 33,8 mil tn r/c/h menos que en agosto (-12,5%).
Al mismo tiempo, estimamos que los volúmenes exportados de carne vacuna continuaron creciendo durante septiembre de 2018. En relación a agosto pasado habrían resultado 5,3% superiores, totalizando unas 55 mil tn r/c/h equivalentes.
En consecuencia, en el último mes el envío de carne vacuna al mercado interno habría experimentado una contracción de 16,7% mensual, hasta convertirse en el mínimo de 2018 con sólo 182,2 mil tn r/c/h.
De confirmarse, esta sería la baja mensual más importante del año (así como también la caída interanual más significativa). En términos per cápita, el envío de carne vacuna al mercado interno habría pasado de 59 kg/hab/año equivalente en agosto a 49,1 kg/hab/año equivalente en septiembre.
En tanto, y aún a pesar del frenazo que se habría registrado en septiembre, la producción de carne vacuna llegó a 2,272 millones de tn r/c/h en los primeros nueve meses del año y se mantuvo 8,9% por encima del volumen producido en enero-septiembre de 2017. Esto implica que entre los períodos analizados se envió al mercado (expo + mercado doméstico) un total de 186,2 mil tn r/c/h adicionales de carne vacuna.
La mayor proporción del aumento de la producción de carne vacuna se volcó a los mercados externos (casi 87% de las 186,2 mil tn r/c/h adicionales). Las exportaciones habrían ascendido a 383,3 mil tn r/c/h de carne vacuna en los primeros nueve meses del año, exhibiendo una recuperación de casi 73% anual. Su importancia en el total producido habría subido de 10,6% a 16,9% entre los períodos analizados.
El crecimiento de los mercados chino y ruso, y la gran depreciación (real) del peso argentino, explican la significativa recuperación de las exportaciones argentinas de carne vacuna en lo que va de 2018. En agosto se exportaron 34,9 mil toneladas peso producto (tn pp) de carne vacuna, el volumen más alto desde finales de 2009. En la comparación interanual el volumen exportado experimentó una expansión de 76,7%.
La facturación por las ventas al exterior de carne vacuna ascendió a 174,5 millones de dólares en agosto de 2018 y se ubicó 81,8% por encima del nivel registrado en agosto de 2017.
Al considerar el acumulado del año, se exportaron 211 mil tn pp de carne vacuna (+74,2% interanual), es decir 328 mil tn r/c/h (+72,1%), a un total de 33 mercados. Estos fueron los volúmenes más elevados de los últimos nueve años. En tanto, los ingresos por ventas al exterior ascendieron a 1.206,8 millones de dólares en enero-agosto de 2018 y experimentaron un crecimiento de 54,9% anual.
China fue el principal destino para la carne argentina en los primeros ocho meses de 2018, al igual que para los socios del MERCOSUR, Brasil y Uruguay.
En enero-agosto de 2018 se exportaron 114,5 mil tn pp de carne vacuna congelada desde Argentina a China, las que llegaron a representar 52% del total. En el caso de Brasil, los envíos a China representaron 44% del total. En el caso de Uruguay, las exportaciones a China explicaron 52% del total.
En lo que respecta a Rusia, los envíos a este país se sextuplicaron (sic). Las ventas totalizaron 25,7 mil tn pp de carne congelada en los primeros ocho meses del año y alcanzaron una participación de 11,7% en el total.
Tal como ya lo señalamos en Informes anteriores, 90% del mayor volumen exportado desde Argentina entre enero-agosto de 2017 y enero-agosto de 2018 se dirigió a China y Rusia. Esto explica en gran medida el avance de la faena de hembras sobre la faena total, y en particular la de vacas (ver sección Nº 1).
En septiembre el precio promedio de la hacienda en pie medido en pesos volvió a subir y a un paso bien veloz. Esto no resultó sorpresivo (más bien, es algo que anticipamos en el Informe anterior), ya que el salto del tipo de cambio se concentró mayormente en los últimos días de agosto. A su vez, el valor del animal en pie experimentó una nueva y significativa contracción medido en dólares estadounidenses.
El precio promedio de la hacienda en pie llegó a $ 41,824 por kilo en septiembre de 2018, registró un alza de 16,3% mensual (el guarismo más elevado desde febrero de 2010, cuando subió 24,8% en un mes), un aumento de 44,2% anual (el ritmo más alto desde octubre de 2016) y un alza de 51,2% con relación a diciembre de 2017.
El aumento alcanzó a todas las categorías, pero el proceso fue liderado por vacas (+24,5% mensual; $ 35,886), categoría que ahora resulta traccionada también por la exportación (China/Rusia), y por toros (17,3%; $ 33,516). Las categorías más vinculadas al consumo doméstico tuvieron alzas de 11,8% (novillos), 10,0% (novillitos), 9,4% (vaquillonas) y 8,0% (terneros). En tanto, los MEJ tuvieron un aumento de precio de sólo 5,6% mensual.
Mientras tanto, en los mostradores del Gran Buenos Aires (GBA) los precios de las tres carnes principales también subieron durante septiembre, aunque lógicamente a un ritmo inferior al dólar y a la variación de la hacienda en pie.
La caída del poder adquisitivo de los ingresos de las familias le pone un freno a la velocidad de crecimiento de los precios al consumidor. La carne aviar fue la que mayor suba registró (14,7% mensual). Por su parte, las carnes vacuna y porcina registraron subas de 8,6% y 11,7% mensual, en términos respectivos. Al comparar con septiembre de 2017, la carne aviar aumentó 55,8%, la carne vacuna, 38,8%, y la carne porcina, 31,6%.
Al considerar los últimos cinco meses (septiembre ’18 vs. abril ’18, mes en que se puso en marcha la corrida cambiaria), la carne aviar sufrió un alza de 39,3%, la carne vacuna otro de 24,5% y la carne porcina una suba de 18,5%. En este período tanto la carne aviar como la vacuna se encarecieron en relación al nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del GBA, que acumuló un alza de 20,1%, y también con respecto al promedio de los salarios del sector privado formal, que aumentó 11,2%. Por su parte, la única que registró una mejora relativa con respecto al IPC fue la carne porcina.
FUENTE: CICCRA