Lanzamiento de Limousin para producir más carne
Un cruzamiento con razas británicas que se venía practicando en el país ahora llevará la certificación Limflex tal como ocurre en los Estados Unidos. Un ganadero bonaerense cuenta cómo utiliza este producto en su rodeo comercial para lograr mayor peso al destete y más rendimiento al gancho.
Se trata de ejemplares flexibles, de ahí el nombre de la marca, que surgen del cruzamiento de vacas Angus, Hereford o Shorthorn, puras o caretas, con toros Limousin y puede incluir distintos porcentajes de sangre de ambas razas según las necesidades del establecimiento.
Si bien estos cruzamientos se venían desarrollando desde hace años en el país, ahora contarán con una certificación de la Asociación, siguiendo un protocolo similar al de un puro controlado, la cual puede ser extendida a una segunda generación.
Los inicios
Oscar Luchessi (en la foto junto a su esposa Mónica Schmale), un productor con campos en Castelli y Cañuelas, Buenos Aires, que hoy preside la Asociación Limousin, le contó a Valor Carne el origen y las bondades del nuevo producto.
Su establecimiento cuenta con un rodeo de 1.000 vacas Aberdeen Angus, que desde hace años recibe servicio con toros Limousin. El planteo es pastoril y los últimos 60 días se hace una terminación en base a grano obteniéndose rindes que superan el 60% promedio en la faena.
“La historia empezó allá por el ‘84, cuando buscábamos mejorar la producción de terneros. Entonces, probamos los primeros toros Limousin en algunas vacas Angus. Ahí, nos dimos cuenta que obteníamos más kilos al destete, aumentábamos arriba de los 15 kg. Como nos fue tan bien, adoptamos estos cruzamientos para todos los vientres y seguimos haciéndolos hasta hoy. Esta es la base del Limflex”, dijo Luchessi en relación al novedoso producto.
De la mano de la mejora de la productividad, el ganadero progresó en pasturas y granos para suplementación. “Fuimos haciendo mejor comida, porque el animal nos devolvía esa inversión en kilos de carne. También invertimos en genética, porque sabíamos que lo recuperaríamos en novillos”, detalló.
El involucramiento de Luchessi con la raza Limousin fue inmediato. “Ya en el ‘85 empezamos a desarrollar una cabaña. Al principio queríamos hacer un biotipo que se adaptara a nuestras necesidades y después salimos a ofrecer nuestros productos al mercado. Actualmente, contamos con 250 madres de pedigree. De ahí salen los toros puros controlados o de pedigree que hoy, como otras cabañas Limousin, utilizamos para el Limflex”, reveló.
Oportunidades Limflex
Para el empresario, los beneficios obtenidos con los cruzamientos de tantos años se consolidan con la marca Limflex, que agrega valor desde la producción a la cabaña.
“Yo estaba haciendo este producto pero no tenía validación. Ahora lo voy a poder ofrecer con un registro y eso brinda garantías a los clientes que quieran mejorar el rendimiento de sus novillos. Podré decirles: ‘mis animales tienen esta marca que certifica que son media sangre o tres cuartos Limousin con Británico’. Y quienes tengan un rodeo Angus pueden participar por ejemplo en la cuota Hilton de la Asociación Limousin que tiene un plus de precios”, indicó.
Otro atributo de la certificación Limflex, es que incluye una segunda generación. “Si uno quiere guardar la ternera que nació del primer cruzamiento y la vuelve a cruzar con un toro Limousin, el producto también está cubierto por el registro Limflex”, contó Luchessi. Y destacó que “esto significa que a ese animal, que mantiene el vigor híbrido, le estamos agregando más Limousin que aporta músculo y grasa justa, sobre todo en los cortes más valiosos del trasero, sin perder las bondades del Angus en cuanto a precocidad y calidad de carne”.
En ese sentido, para el presidente de Limousin, la principal ventaja del Limflex se ve a la hora de la faena. “Los rendimientos de una raza pura que históricamente están en el 57 o 58% aumentan 2 ó 3 puntos, superando el 60%; es mucha plata. Todos nuestros compradores, que son los mismos desde hace años, notaron la diferencia y nos pagan el precio máximo, por calidad y mayor rendimiento. Ellos también hacen mejor negocio”, aseveró.
En el mundo
La innovación que hoy se presenta en la Argentina, ya se viene aplicando desde hace muchos años en Estados Unidos, Australia, Canadá y Brasil (sobre base Nelore) siempre con la certificación de las asociaciones de Limousin de cada país.
En Estados Unidos el Limflex es el cruzamiento industrial más utilizado y eficiente, y el único que reconoce Angus para sus programas de carne certificada. Pero su presencia va más allá y avanza muy parejo con Limousin puro de pedigree. “En la Exposición de Denver, la más importante de ese país, cuando usted va a ver la jura de Limousin, la mitad es Limousin definido y la mitad es Limflex sobre Angus y Hereford”, afirmó Luchessi.
A la hora de las conclusiones, el cabañero destacó otras ventajas de la tecnología de cara a lo que se viene para la ganadería. “Por su plasticidad permite hacer un producto para el consumo o exportación, de acuerdo a las señales del mercado. Los novillos se venden entre 410 y 420 kg. Si se reactiva la exportación se pueden superar perfectamente los 430/440 kg (el piso del segmento) porque la sangre Limousin hace que no engrasen rápidamente y generen más carne en los cortes del trasero que los mercados externos valorizan más”, subrayó.
En tanto, también subrayó que el Limflex es “una oportunidad para aquellos que no quieran romperse la cabeza con la genética, ni armar rodeos importantes para vender toros. Los Limflex media sangre o tres cuartos hoy cotizan como un toro puro controlado de Limousin. El mercado ya valoriza este producto”, finalizó.
FUENTE: Valor Carne