El Gobierno formalizó el control de exportaciones de carne y puso un cepo al ingreso de nuevos jugadores
A través de la Resolución Conjunta 3/2021, el Gobierno puso en marcha un nuevo registro para la exportación de carnes
A través de la Resolución Conjunta 3/2021, el Gobierno puso en marcha el nuevo registro para la exportación de carnes, denominado Declaración Jurada de Operaciones de Exportación de Carne (DJEC), que recuerda los ROE (Registro de Operaciones de Exportación) creados por el anterior gobierno kirchnerista, que venía acompañado de cupos de exportación muchas veces distribuidos discrecionalmente, que llevó a la enorme liquidación de vacunos de 2008/09. Al asumir el gobierno de Mauricio Macri, en 2015, abolió los ROE y para exportar solo era necesario sacar un permiso de embarque en la Aduana.
Ahora, la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario, dependencia del Ministerio de Agricultura, será la encargada de estas nuevas DJEC, que deben informar, entre otros requisitos, el período de embarque de la mercadería, datos identificatorios del exportador, tipo de mercadería (deberá aclararse partida arancelaria, certificación sanitaria, categoría de animal), tipo de carga, volumen de venta en toneladas, precio FOB oficial y fecha de cierre de venta, mientras que del comprador habrá que indicar denominación, tipo societario, domicilio, país, si es intermediario o destinatario final, etc. La exigencia es para las carnes bovinas, ovinas, porcinas, caprina, equina y de pollo.
Desde los ministerios de Agricultura y de Desarrollo Productivo sostuvieron que la herramienta no pretende poner cupos ni cerrar exportaciones, sino que apunta a controlar la subfacturación en las ventas externas y a verificar el cumplimiento de acuerdos de precios y abastecimiento, que hasta el momento no vienen funcionando para sostener la inflación, que llegó a 4,8% mensual en marzo. Pero en el sector no confían y lo sienten como una espada de Damocles, además de una excesiva carga burocrática.
Las cuatro entidades nacionales de productores agropecuarios, reunidas en la Comisión de Enlace, comunicaron que la medida, inconsulta e inesperada, genera un estado de alerta, y “abre un tiempo de consulta con nuestras bases, porque rompe con la promesa de diálogo que hicieron las autoridades y demuestra un altísimo desinterés en los productores y en el sector”, mientras que consideraron que por parte del Gobierno “no existe un compromiso real de diálogo”.
Por otra parte, también esta semana se publicó la Resolución 60/2021 del Ministerio de Agricultura, que dispone nuevos requisitos para los exportadores de carne, granos y lácteos que se quieran anotar en el Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA). La normativa, que no alcanza a los operadores que ya tienen un establecimiento propio inscripto en el RUCA, también dice buscar controlar la evasión impositiva y las maniobras de subfacturación. Pero, entre todos los requisitos que impone, agrega el de presentar un “plan de trabajo proyectado para el próximo año, con detalle de mercadería a exportar, volúmenes, proveedores y destinos”, una información prácticamente imposible de tener en un contexto de pandemia y un país que cambia las reglas de juego permanentemente. Las cuatro cadenas de cultivos más relevantes del país (Acsoja, Maizar, Asagir y Argentrigo) salieron públicamente a rechazar la medida.
FUENTE: Faxcarne